domingo, 26 de marzo de 2017

Un lugar seguro para tu corazon.



-Le confie mi corazón y lo destruyó!

fue la frase que expresó Sofia antes que rompiera en llanto de una manera inconsolable.
después de calmarse un poco nos compartió su historia.

10 años de vivir al lado de quien consideró el amor de su vida, parece que todo iba bien, al menos eso es lo que ella quería creer, pero desde hace algún tiempo hubo cambios notables en el, la relación ya no era la misma.  Un  dia pasó lo inevitable, tomó sus cosas y se marchó.
-Es como si yo cayera en un abismo y hasta éste día no llego al fin de el. Dice Sofia.


Cuantas mujeres se encuentran en éste abismo el dia de hoy, que parece no tener fin.
su corazón esta destrozado, porque el engaño,  la traición, y la infideli-
dad son semejantes a una espada de mucho filo que atraviesa el alma.




Déjame decirte que nuestro corazón es una pieza tan delicada que Dios nos ha regalado.
y es muy común que la mujer lo deposite en manos de su pareja.      Hay quienes lo entregan en manos de sus padres o de sus hijos, por lo tanto están expuestos a sufrir daños o dolor.

Recuerda que los seres humanos somos imperfectos, todos podemos fallar. El único en quien podemos confiar es Dios,  Porque el nunca falla, El  nos amó desde antes que fuésemos creadas.
Sabes que de la condición de nuestro corazón depende nuestra salud espiritual, física y emocional?  Con tanta razón la palabra de Dios aconseja, que antes de cualquier cosa, guardemos nuestro corazón, porque de el proviene la vida. Pr. 4:23.

No hay lugar mas seguro para nuestro corazón, que las manos de Dios.  Si aún no se lo entregas, hazlo ahora!   Te garantizo que allí no sufrirás pérdida, y el se encargará de poner las personas correctas a tu alrededor, para que te amen y te cuiden.      
 Cuando nuestro corazón esta en las manos de Dios, tomaremos decisiones correctas a la hora de elegir a quien amar y en quien confiar.

Si consideras que este mensaje llegó tarde a tu vida, porque tu corazón ya ha sido lastimado, pues en quien mas confiabas te traicionó. (Puede ser tu pareja, tus padres, tus hijos, tus amigos)  Déjame decirte que nunca es tarde,  el Señor ha provisto para ti sanidad, el te ama y está interesado en sanar tu corazón, deposítalo en sus manos, el es especialista en curar las heridas de un corazón roto.   Salmo 147:3

Escucha la voz de Dios que te dice: Dame hijo mio tu corazón y  no pierdas de vista mis caminos. Pr. 23:26.
Este es el único requisito, que tus ojos estén atentos a su camino y el se encargará de tu corazón.
Nunca lo olvides el mejor lugar para tu corazón son las manos de Dios.







Bendiciones
Susana Arteaga-Enfoque a la Mujer