jueves, 11 de junio de 2015

El poder del perdon.



Quiero hablar un poco sobre el perdón.
 Una palabra sencilla, pero que encierra un gran significado. Y como hijas de Dios, el espera que practiquemos el perdón.
Perdonar es absolver una pena, es renunciar a castigar una ofensa recibida. Y mira el significado en el original perdonar es ..... Renunciar a castigar a una persona, es soltar, dejar libre. Dejar ir, Perdonar es cortar lazos que te unen con el ofensor, sabes que, el no perdonar significa mantener atado al ofensor, es como si trajeramos atado a nuestras espaldas a aquel que nos ha ofendido, es traer un enorme peso de rencor de odio, y venganza, lo Cual también trae terribles consecuencias a nuestra Vida, y con gran razón Muchas de nosotras no estamos corriendo muy bien nuestra Carrera espiritual, Porque Claro es tan dificil avanzar con tan semejante peso.
 Imaginate a aquella persona que alguna vez te ha ofendido, te ha herido y que tu la traigas literalmente sobre tus espaldas, es imposible caminar con libertad, lo traes atado a ti emocionalmente, lo traes en tus pensamientos, te duele cada vez que lo recuerdas. Y que Miras o escuchas cosas sobre ésa ofensa.

Se que perdonar es algo muy dificil, y humanamente imposible pudiéramos decir . Y tu me diras, es que ud. No ha tenido que pasar por algo asi, permiteme decirte Amiga, todas en algun momento de nuestra vida, Hemos pasado por una situacion asi, nos han lastimado o hemos lastimado a alguien mas, ya sea con palabras o actitudes, y si hoy te hablo de estos temas, es Porque yo tambien lo he experimentado, y en medio de este dolor, Dios me ha demostrado que su amor tiene el poder para sanar las heridas que provocan esas ofensas y tambien me ha dado la capacidad de poder perdonar y también de pedir perdón cuando tenemos que hacerlo. Y sabes que amiga, El Señor nos demanda que perdonemos, no es fácil! Pero es un mandáto. Efesios 4:32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonandoos unos a otros, como también Cristo nos perdonó. Cuando dice PERDONANDOOS unos a otros, aquí está implícito que todos nos hemos fallado unos a otros, nos han ofendido, pero también hemos ofendido, por lo tanto quiere decir que debemos pedir perdón y también perdonar.
 La oración del Padre nuestro, la oración modelo, dice Perdónanos, así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, nos enseña que podemos recibir el perdón de Dios, porque nosotros ya hemos perdonado a otros.

 Yo se que no es fácil querida amiga, se que en este momento pasa por tu mente la imagen de aquella persona que te ofendió, de aquel hombre que se burlo de ti, que te denigró, que quizá te maltrató física o verbalmente, pero déjame decirte, que Dios esta dispuesto a sanar esas heridas, que nadie te ama como el, tal vez alguien te han hecho sentir, despreciada, inútil, pero para mi Señor tu eres especial tesoro. Y el te puede dár la capacidad de perdonár y ser libre del rencor, del dolor, del deseo de venganza.
Me podrás decir amiga, es que me han hecho tantas cosas, me han dicho tantas palabras hirientes, pero Muchas veces Cual ha sido nuestra actitud hacia Dios, le Hemos fallado, mas el nos ha perdonado. Al pie de la Cruz Jesus exclamo: Padre perdónalos, Porque no saben lo que hacen. Mientras aquella multitud le injuriaba y azotaba. El imploraba perdon por Ellos, que grande es el Amor de Dios. 
Sabes? El perdon libera, el perdon trae Paz, pero Cuando no perdonamos somos atormentados por la amargura, por ese resentimiento que nos azota, a la mejor ya han pasado meses, años, y dices no he podido perdonar, todavía mantienes ese resentimiento en ti, ya es tiempo que seas feliz, que seas libre! Sabes que amiga, el resentimiento nos agobia, nos quita el sueño, nos trae desajustes físicos, enfermedades, y sobre todo la falta de comunión con Dios. Porque mientras nos mantengamos sujetos a las heridas que otros nos provocaron, nos mantendremos, atados a nuestro pasado. Libérate, suelta ya a las personas que te lastimaron.

Y cuando hablamos de perdonar no estamos diciendo que tienes que continuar con una relación dañina, No!  La reconciliación es otra cosa y esa es tu decisión, pero el perdonar si es necesario para poder tener paz. Al perdonar estamos desatando al ofensor, esa es la llave para tu libertad, porque mientras no perdonamos al ofensor, nos mantenemos atados a el, y así no disfrutaremos la libertad, no podremos servir a Dios en plenitud. Nunca dáremos fruto como Dios quiere, y así estamos frenando la obra de Dios, en nuestra vida.
 La amargura es veneno para el alma, y la consecuencia más grave es que nos separa de Dios, El escritor de la epístola a los Hebreos nos advierte Heb 12:15 "Mirad bien no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raiz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados". 
No solo nosotros sino también los que nos rodean. Nuestra familia sera contaminada, nuestra iglesia, nuestra sociedad aun el mundo entero puede ser contaminado. Por la falta de perdón.
 Y Como se origina la amargura? Se recibe una ofensa y no se perdona al no perdonar la ofensa se convierte en ira, posteriormente la ira se vuelve un resentimiento y el resentimiento da lugar a la amargura, si no eliminamos la amargura, esta les dará paso a la depresión, y un sin fin de enfermedades, mira todo lo que viene por la falta de perdón. la palabra dice que a Paz nos llamo Dios y que el castigo de nuestra paz fue sobre el, Is 53:5 el ya pagó el precio por nuestra paz, porque no recibirla?

Quiero compartirte la historia de Sara, Cuando yo tenía 9 años de edad, estaba en el tercer grado de primaria, y Alli empezó mi calvario, dice ésta Mujer. Era una niña muy tímida, y por lo mismo mis grados siempre eran muy bajos, y esto me metía en problemas con mi maestra, quien me maltrataba por ser diferente a las demás y por no ser inteligente como ellas, un día mi maestra ya no soporto mas mí forma de ser tan tímida y distraída. Y hablo con mis compañeros de clase, eran 25 niños en el grupo. Y les dijo cada uno de Uds. Pasará y escribirá una frase negativa para Sara, mientras ellos escribían me mantuvo de pie a un lado de la pizarra. El primero escribió: Sara es una tonta, Sara es gorda, Sara no merece estar en el grupo, Sara es fea. Sara no debió haber nacido. Así siguieron hasta terminar las 25 frases. Sara permanecía en silencio mientras leía lo escrito, mientras tanto cada frase laceraba su pequeño corazón dentro de ella, estaba sufriendo y era marcada por el resto de su vida. Esa tarde La pequeña salió desecha de la escuela. Llego a su casa y dijo sentirse enferma y lloro toda la noche. Pero eso no terminó allí, Sara sigue sufriendo el resto de sus días, los meses , los años, Llegó a los 40 años y Sara seguía con ese recuerdo, las frases estaban aún vivas en su mente, aquello destruyó por completo su auto estima.
 Paso el tiempo y ella seguía sufriendo, en dos ocasiones quiso quitarse la vida, no le encontraba sentido. Un día fue a buscar ayuda con un consejero cristiano, el le hablo del gran amor de Dios y su interés por ella. No fue fácil para Sara, estuvo 2 años en esa terapia, y al final el consejero le dijo vamos a regresar a esa Esc. Sara tenía miedo regresar, pero aceptó, al llegar al salón de clases estaba vacío, el consejero le dió un marcador y le dijo que escribiera cada una de las frases, que ella recordara, ella empezó a escribir cada una, las recordaba como si hubiera sido ayer. Al terminar, el consejero le dice, Jesús vino esta tarde también y el esta pasando a la pizarra y esta borrando cada frase escrita, y no es un borrador cualquiera, es su preciosa sangre la cual derramo por ti, porque nadie te ama como el. Y ahora que el ya eliminó todo lo negativo empieza a escribir, algo nuevo sobre ti. Sara es la niña de mis ojos, Sara es mi especial tesoro, Sara es una princesa, Sara es hermosa, Es inteligente, yo entregue mi vida por Sara porque la amo. Sara empezó a llorar y a agradecer a Dios su gran amor. Ese día tomo la decisión de perdonár y aceptar la sanidad de su corazón.
 Eso mismo hace Jesus por ti querida amiga, hoy el toma ese borrador, su preciosa sangre y borra, todo lo negativo lo que te ha lastimado, y empieza a escribir cosas nuevas para ti, permite que Dios cumpla su propósito en tu vida, no dejes que se te vayan los años, hoy acepta la sanidad de mi Dios para tu corazón.

Recuerda amiga el perdonar es una decisión, no es un sentimiento, Y el olvidar es un proceso, y en el proceso Dios estará contigo, quizá lo recordaras, pero cada vez te lastimará menos. Decide perdonar hoy, se libre, se feliz.
Bendiciones
Pastora Susana Arteaga.
El perdon, sana, libera y restaura poderosamente.