10 consejos de la Biblia para ser madre

- “El hijo necio es tristeza de su madre” (Proverbios 10:1). Así que no consientas malcriadeces en tus niños, porque llegarás a entristecerte.
- Dirige a tus hijos en la elección de buenos amigos; porque “el que anda con sabios, sabio será” (Proverbios 13:20), y un buen amigo “es como un hermano en tiempo de angustia” (Proverbios 17:17).
- Haz que entre tus hijos reine ellos la alegría y la armonía. Porque “el corazón alegre constituye buen remedio” (Proverbios 17:22).
- No consientas entre ellos las malas conversaciones. Porque “corrompen las buenas costumbres” (1 Corintios 15:33).
- “El muchacho consentido avergonzará a su madre”. (Proverbios 29:15) Así que no seas consentidora, porque llegarás a avergonzarte de tu hijo.
- Corrige a tu hijo y te dará descanso y deleite. “…te hará vivir tranquila, y te dará muchas satisfacciones” (DHH Proverbios 29:17).
- No olvides que la mayor autoridad se ejerce mediante el buen ejemplo. Por eso muéstrate “en todo como ejemplo de buenas obras” (Tito 2:7).
- “La mano de los negligentes empobrece” pero “la mano de los diligentes señoreará”. (Proverbios 12:24; 10:4,5). Por ello, haz que tus hijos sean diligentes desde su más temprana edad.
- Instrúyele a tiempo para que sea feliz. Porque si lo instruyes en el buen camino, “aun cuando fuere viejo no se apartará de él (Proverbios 22:6).
- Recuérdales siempre que: “El temor del Señor es la sabiduría, y el apartarse del mal la inteligencia.” (Job 28:28).