Los médicos dicen que la piel debe cuidarse con mayor severidad en los primeros años de vida. Además, agregan que antes del año, a los bebés no hay que exponerlos al sol. Y desde los 6 meses ya pueden usar protector.
Si la persona tiene una piel muy blanca lo ideal es un factor de protección 40 o 60. En el caso de las pieles más morochas pueden usar un factor 15. Pero, lo recomendable es siempre usar un factor de 30 para arriba
Sin embargo, no todo es negativo a la hora de la exposición al sol. Los estudios explican que las pequeñas exposiciones a los rayos UV son positivas porque juegan un rol esencial en la producción de vitamina D.
Elegir el mejor protector solar: depende de la sensibilidad de cada piel a la radiación solar, del tipo de piel, de los lunares y pecas, de los antecedentes familiares de cáncer cutáneo.
Por ejemplo, un hombre velludo está menos expuesto que una nena de 10 años. Por esa razón, los médicos recomiendan que sea el dermatólogo quien determine el filtro adecuado o, como mínimo, que consulte al farmacéutico
Cómo aplicarlo: en forma pareja en todo el cuerpo 30 minutos antes de ponerse al sol, 2 gramos por centímetro cuadrado y en forma uniforme. No olvidarse de zonas delicadas: cuello, orejas.
Además, hay que volver a aplicarlo cada dos horas o después de haber transpirado mucho o de haber estado en el agua más de 40 minutos.
Horarios de exposición: para evitar el daño solar nohay que exponerse entre las 11 am y las 3 pm. En esos momentos, los rayos UV son tan intensos que, si queremos permanecer al aire libre, el único modo de que no nos afecten es recurrir a la sombrilla o a un árbol.